Ni cigarrillo tradicional ni electrónico. Los neurólogos lo han entendido claramente: son tóxicos para la salud. Y la opinión del alcalde de la autoridad sanitaria mundial también es firme: “A la luz de las afirmaciones de “reducción de riesgos”, no hay indicios que demuestren que los productos de tabaco calentados sean menos dañinos que los productos de tabaco convencionales. El último comunicado de la OMS sobre el consumo de cigarrillos electrónicos informa que «muchas sustancias tóxicas para el humo del tabaco se encuentran en niveles considerablemente más bajos en los aerosoles de los productos de tabaco calentados, pero estas sustancias contienen otras sustancias tóxicas que están presentes repetidamente». en niveles superiores al humo del tabaco, como glicidol, piridina, dimetilo trisulfuro, acetoína y metilglioxal«. Durante la combustión del tabaco tradicional se producen más de 4.000 productos tóxicos diferentes. Entre ellos, esto puede deberse a su particular vulnerabilidad ya las infecciones que pueden asociarse a los alquitranos, responsables de tipos de cáncer; monóxido de carbono, que favorece la inflamación cardiovascular; irritantes (fenoles, amoníacos, ácido cianhídrico), responsables de enfermedades respiratorias como bronquitis crónica e inflamación pulmonar; y la nicotina, que causa dependencia del tabaco. Entre los productos tóxicos que integran un cigarro tradicional también se encuentran sustancias como butano, cadmio, ácido acético, metanol, tolueno, arsénico, amoníaco, monóxido de carbono y ácido esterico. MÁS INFORMACIÓN nicia Non en qué que direfencia el tabaco calentado de la vapeador et Porqué Sanidad sólo lolo limita uno de ellos. Los cigarrillos electrónicos no son su mejor opción. En los aerosoles de estos productos se han identificado sustancias cancerígenas y partículas ultrafinas asociadas a la nicotina. Entre los carcinógenos pueden contener: nitrosaminas específicas del tabaco, ácidos, compuestos orgánicos volátiles e hidrocarburos aromáticos políticos. Entre las partículas ultrafinas se encuentran partículas de metales pesados, que de hasta menos de 0,5 micrones de diámetro penetran fácilmente en el interior de los pulmones y pueden distribuirse al torrente sanguíneo por todo el organismo y causar daños a muchos organismos y sistemas, según información de la Sociedad. Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ). El mismo documento afirma que los cigarrillos electrónicos también contienen radicales libres y especies reactivas de oxígeno que provocan oxidación y perjudican la proliferación y el metabolismo celular. Asimismo aparece como compuestos orgánicos y fenólicos volátiles; y otros alimentos como furanos, ftalato de dietilo y ftalato de dietilhexilo. Detectó metales como cromo, níquel, plomo, manganeso, aluminio, estaño y ayer, en ocasiones de gran popularidad en encuentros con el cigarro convencional. El consumo ocasional de tabaco supone cada año en España menos de 69.000 muertes prematuras y más de 1,7 millones de años de vida perdidos, según datos del Comité Nacional de Prevención del Tabaco (CNPT). Fumadores pasivos El humo del tabaco tradicional perjudicial para la salud de los fumadores pasivos, pero también produce emisiones de los cigarrillos electrónicos, que suelen contener nicotina y otras sustancias tóxicas que son nuevas tanto para los consumidores como para los no consumidores. Se prueban en aerosoles para jóvenes, según la OMS, que advierte que nos hemos encontrado con algunos productos que afirman ser deficientes en nicotina y contener nicotina. La nicotina es altamente adictiva y algunas experiencias sugieren que las personas que nunca han fumado y usan un cigarrillo electrónico pueden duplicar sus posibilidades de comenzar a fumar cigarrillos de tabaco más adecuados. Aunque no conocemos todos los efectos de los cigarrillos electrónicos a gran escala, se ha demostrado que liberan sustancias tóxicas que son cancerosas o aumentan el riesgo de enfermedades cardíacas y pulmonares. Además, la exposición a la nicotina en mujeres avergonzadas puede tener consecuencias similares para el desarrollo del cerebro fetal. Según la OMS, existe una necesidad urgente de controlar los cigarrillos electrónicos para proteger a los niños y a los no fumadores y reducir todos los posibles efectos de estos productos en la salud humana. «No está claro que los cigarrillos electrónicos no ayuden a dejar de fumar, porque tenemos pruebas alarmantes de sus beneficios para la salud», afirma. “Los cigarrillos electrónicos promueven que los más jóvenes consuman carbón de nicotina. Las autoridades nacionales deben actuar con firmeza para impedir el consumo de estos productos y así proteger a nuestros ciudadanos, especialmente a los niños y jóvenes”, confirmó ayer el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS.