El envío de toxina botulínica con fines estéticos a España lleva 20 años y parece que para ella también el tiempo ha pasado. Son cada vez más los pacientes que piensan que el efecto del botox es menos severo, mientras pasan tiempo con los profesores. En la duración de este medicamento, conocido popularmente con el nombre comercial de botox, pueden influir muchos factores entre los que concurren en las características de cada paciente en la técnica o en las manos que inyectan este preciado y popularizado elixir. En un reciente estudio publicado en la revista de la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME) – ‘Toxina botulínica. ¿Por qué dura menos? Una revisión de nuestra experiencia’-, dos expertos en la materia analizaron la evidencia científica y su propia experiencia para determinar qué sucedió con este tratamiento, el más utilizado en medicina estética en estos momentos. Noticias Relacionadas estandar No Bótox y ácido hialurónico, los tratamientos de medicina estética más solicitados en España Araceli Nicolás estandar Si Llega el ‘bótox’ que dura el doble Nuria Ramírez de Castro Los autores señalan que, si la toxina tiene una proteína en su capacidad, el sistema inmunológico El sistema puede desarrollar resistencia, lo que implica que los pacientes pueden desarrollar su sistema inmunológico al Botox. Sin embargo, “las causas no inmunes son las más determinantes en la pérdida de efecto”, asegura el doctor Justo M. Alcolea, coautor del estudio y editor coordinador de la revista Medicina Estética (SEME) y director médico de la Clínica Alcolea. Actualmente hay cuatro tóxicos autorizados en España para aplicaciones estéticas y todos los hilos del tipo A (TB-A), pero el principio sólo tiene una autorización y se utiliza tanto para tratamiento terapéutico como estético. Para Carmen Lorente, directora del área de medicina estética de The Beauty Concept (TBC), no hay tanta pérdida de efecto si es menor que antes, lo que provoca que se disuelvan ante estas reanudaciones. “Mi opinión es que ahora tampoco podemos tomar los neuromoduladores que vienen antes. Los pacientes tienen naturalidad porque hoy la tendencia es tener una proporción menor, que es lo más adorable”, explicó el experto, aunque Alcolea no coincide con ello en este caso. Además, en las cantidades utilizadas, parece que el problema se debe a causas no inmunes. Concretamente, en lo que se refiere a las características del paciente como la edad, el sexo, la gesticación e incluso el fin de año que aplica. Además, el efecto también es reconstruir la toxina, la técnica utilizada y la esperanza entre una infección y otra. Factores del paciente La duración de la toxina botulínica es mayor en las mujeres que en los hombres, que tienen músculos más desarrollados que las mujeres, porque pueden estar infratratados. Cuando pienso en la edad, tengo que detenerme en dos aspectos. Se aprueban diversos tóxicos para empleados de personas mayores de 65 años y esto ya no se respetará en muchas ocasiones. Sí, es importante porque la fuerza y ​​la masa muscular disminuyen con la edad. Por lo tanto, los pacientes más jóvenes necesitan una proporción mayor para informar el efecto. Debes saber que actualmente se recomienda el tratamiento con toxina botulínica para personas con hiperitis, que gesticulan constantemente y de forma ajena a la expresión emocional. “Ahora hace falta mucho deporte y el ejercicio físico cuida esos neurorreguladores porque altera más los músculos y los seca antes” Carmen Lorente Según Lorente, también puede influir en los seres, que han aumentado en la población en los últimos años, y ejercicio. físico. “Ahora hace falta mucho deporte y el ejercicio físico cuida estos neurorreguladores porque contrarrestan más los músculos y los dañan”, afirma. Sin embargo, Alcolea considera que esto puede ocurrir si tenemos una intensidad y frecuencia de ejercicio muy elevada, pero esto no es determinante. En el estudio se certifica que el cuidado del paciente induce una duración más corta del efecto del botox porque altera los músculos faciales durante el período más largo. Además hay que tener en cuenta la época del año en la que realizamos el tratamiento ya que el calor y la exposición solar prolongada pueden corregir el efecto de este tratamiento. La aplicación del doctor Cabe resaltar que el tratamiento estético con botox es algo que sólo un médico puede realizar porque su aplicación es muy precisa. El primer factor que debe estar presente es la reconstrucción de la toxina. La forma en que se realiza este proceso (que consiste en mezclar un polvo con azúcar salina) puede ayudar a conservar la potencia y prolongar la duración del efecto. Según el estudio, un manejo brusco en este punto puede provocar una pérdida de eficiencia del 42%. La técnica utilizada también es clave porque pueden influir la velocidad como la presión, el tipo de jeringa, la posición del bisel y el tamaño de la aguja. “No hay forma de ataque contra la intrusión en la amenaza de los humos” Justo M. Alcolea Por allo esto los dos expertos consultados por ABC ponen el foco en tener sumo cuidado con las manos que nos van a tratar. “Ahora existen muchos sitios donde un paciente puede aplicarse la toxina y adquirirla a través de la web. Nadie sabe exactamente cómo es el fabricante y cuáles son sus garantías. Y se supone que el médico personal que se contagia no es el adecuado. No existe ningún tipo de ataque contra el intrusismo que pese sobre las intrusiones”, denuncia Alcolea. “Hay que súper cuidadoso. La técnica es fundamental. Un neuromodulador bien capaz es el trabajo más difícil de realizar. Sólo la práctica permite entender el final del tratamiento y lo importante es la precisión tanto del producto utilizado como del médico”, opina Lorente. La frecuencia es la última en la que la frecuencia de la infección puede causar la probabilidad de que el paciente sea inmune al botox. “Ahora en algunas clínicas se dividen en tres tratamientos y cada vez tratan un área. Si aplicas inyecciones sin respetar los intervalos de tiempo mínimos, aumentarás las posibilidades de prevención que bloquean la toxina. Y yo también lo vendo”, critica Alcolea. En este sentido, los médicos deben intentar que las intervenciones se realicen con un intervalo de tiempo máximo. “Si respetamos los intervalos y las inyecciones de los pacientes durante dos sesiones durante el año, no vemos que haya problemas de menor duración”, explica el experto, entre los cuales los pacientes sólo detectaron una reducción del efecto del botox.