Una tormenta invernal masiva azota a gran parte de Estados Unidos con temperaturas gélidas, poderosos vientos y fuertes nevadas. El fenómeno ya cobró la vida de casi una decena de personas, y más de un millón de clientes perdieron el servicio eléctrico. Debido a la cancelación de miles de vuelos, la tormenta además arruinó los planes de muchos estadounidenses que viajaban por motivo de la Navidad. Anthony Reynes, meteorólogo sénior de la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), explica cuánto más durarán los efectos de la tormenta.